La Central Nuclear de Almaraz celebró ayer un simulacro de emergencia anual, recreando un nivel 2 en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares.
Para su realización, los trabajadores de la planta se han basado en los requerimientos enmarcados en el Plan de Emergencia Interior y contaron con la participación de la Organización de Respuesta ante Emergencias del Consejo de Seguridad Nuclear.
Poco antes de las 10 de la mañana, ayer daba inicio este ejercicio que simulaba la intrusión de una persona en el doble vallado de la central a través del embalse de Arrocampo. Así, se hacía necesario que el CECOP (Centro de Coordinación Operativa) activase el Plan de Emergencia Nuclear de Cáceres.
Por otro lado, también se simulaba un aumento del agua embalsada por lluvias torrenciales, que ocasionaba inundaciones en zonas de seguridad de la planta y provocaba la pérdida de varios sistemas de seguridad.
Ante esto, se debía proceder a la parada manual del reactor de la Unidad 1 y se tenía que poner en marcha el sistema de agua de alimentación auxiliar para mantenerlo refrigerado.
En la cadena de posibles sucesos, sería previsto declarar una emergencia de categoría 3, como se establece en el Plan de Emergencia Interior, mientras que el Consejo de Seguridad Nuclear debía activar los grupos de apoyo de su Organización de Respuesta ante Emergencias.




























